Desde París triunfa un proyecto de knitwear que utiliza un proceso creativo realmente original para que sus prendas se hagan realidad. Se llama WASTE YARN PROJECT y tras él se esconde Siri Johansen, una diseñadora que ha trabajado en firmas como Burberry o Kenzo. Durante sus más de diez años de experiencia Siri observó cómo se acumulaban regularmente decenas de cajas llenas de hilos sobrantes de producciones antiguas en las fábricas. Cada suele contener materiales de diferente color y composición y la mayoría de las fábricas ven estas pequeñas cantidades como desperdicios.
Estas cantidades «dormidas» de hilos esperando para ser utilizadas son la materia prima principal de firma de moda zero waste que es cien por cien artesanal. Y, atención, para su creación se utiliza el azar a través de… ¡una ruleta! Cada vez que una de las tejedoras va a producir una prenda, recurre a ella para elegir con qué cuatro, cinco o más hilaturas va a trabajar en un diseño. Así no solo se consigue utilizar todo el excedente, si no que además surgen prendas que son realmente únicas y, para garantizarlo, están numeradas. Original modo de producción, ¿verdad? En ECOLOVER nos tiene enamorad@s.
El resultado final del proceso es una propuesta de jerséis y gorros de punto que surge del aprovechamiento de materiales excedentes y conecta con la estética grunge de los años 90. Obviamente, su diseño también se inspira en el legado de la técnica del patchwork a través de la Historia de la Moda, pero de un modo no demasiado evidente o trillado. En París, Waste Yarn Project ya es un proyecto de knitwear clave a tener en cuenta cuando se trata de upcycling y, observando cómo ha evolucionado desde el pasado 2020, está claro que va a crecer… y en la dirección correcta.
